La Ópera de la ciudad de Nueva York va ha celebrar este viernes una noche exclusiva para aficionados gays, “Bottoms Up!”, en la que se va a interpretar “L’elisir d’amore” de Donizetti. Se trata de una versión de Jonathan Miller, ambientada en EEUU en los ’50. Miller ha revolucionado la ópera ambientando “Rigoletto” de Verdi en la Pequeña Italia de Nueva York y “La Bohème” de Puccini en los años ’30 del siglo XX.
El reparto incluye a los mexicanos David Lomelí y José Adán Pérez, además de Stefania Dovhan, Marco Nisticò y Meredith Lustig.
Esta ópera va a estar en cartel hasta el 9 de abril, pero el próximo viernes la ejecución está especialmente dirigida a los aficionados gays. Y para que no haya dudas y caer en los tópicos, la dirección de la Ópera de Nueva York ha decidido incluir un show de la drag queen y cantante profesional de ópera Shequida.
Shequida es una institución en NYC los jueves por la noche en el famoso bar gay “Barracuda”. El show es una especie concurso para drag queens principiantes, donde Shequida parodia anuncios y canciones.
Este tipo de iniciativas dirigidas exclusivamente a gays, ¿nos las debemos tomar como resarcimiento por tantos siglos de discriminación o es un paso atrás en el camino de la normalización?, ¿es lícito combinar a Donizetti con la drag queen Shequida?
