Juana la Loca, la comparsa gay por excelencia, ha ganado este año el concurso del carnaval de Cádiz. Con la letra de este año han pretendido denunciar la homofobia, pero no de la forma más acertada.
La historia de la comparsa describe la vida de un homosexual, pero del estereotipo de gay que puedan tener personas de 60 años para arriba. Es decir, un gay al que le gusta maquillarse y vestirse de mujer. Una “mariquita” de la España de pandereta, con la que nadie puede sentirse identificado. En todo caso, lo que en realidad presentaban era la vida de un travestido, que también merecen que rompan una lanza por ellos o ellas, pero que no tienen que ver con ser o no gay.
Para aumentar la carga dramática, los componentes de la comparsa aparecieron con falda-pantalón, cada uno de un color del arcoiris, levita, chistera y pañuelo al cuello… muy de cabaret. El autor de la comparsa, Tino Tovar, asegura que han tenido el apoyo de la asociación COLEGADES, ¡esto es lo más sorprendente!, ¿cómo se puede identificar a estas alturas el travestismo con la homosexualidad?, ¿cabe más caspa?
Flaco favor hacen estas manifestaciones a los gays y a Carnaval de Cádiz.